¡Alto ahí, piltrafillas!
Enseñadme vuestros carnés de autistas. Para hoy. Que si no me cierran el Dunkin y la vamos a tener.
… vale, no. No quiero que me enseñéis nada. Sobre todo considerando que ahora tengo el monopolio de producción de carnés de autizmo (?. Pero seguro que esta situación es algo que todes hemos vivido en nuestras carnes, al menos una vez.
Gente, que seguramente no nos conozca de nada, o como mucho la podamos catalogar de “conocides”, nos pide pruebas y explicaciones sobre nuestro autismo. Como si se lo debiéramos, porque el ser diferentes nos hace menos, o algo así.
O como a mí me gusta llamar a este tipo de personas: policías del autismo.
¿Y por qué existen? Porque hay gente ahí afuera, que en lugar de escuchar y aprender, simplemente han interiorizado la realidad más extrema del espectro autista, que son aquellas personas que son no hablantes, posiblemente con discapacidad intelectual y que necesitan un nivel bastante elevado de apoyos para poder tener una vida digna. Sí, ignorando que hay muchas formas de ser autista ahí afuera, y que no todes estamos en ese nivel.
Y si lo estuviéramos, ¿y qué?
El caso: que como no somos lo que elles (erróneamente) creen que es el autismo, pues claro, nos ponen en duda. Y aquí es donde la cosa se pone fea. Porque si les quieres mostrar pruebas, podrán decir que no son reales. O pueden pedir más. Porque dejad que os diga una cosa: nunca es suficiente para esta gente. Absolutamente nunca.
¿Pero qué pasa si eres autodiagnosticade? ¿O estás esperando a que te hagan las pruebas, pero tú estás convencide? ¿O simplemente no quieres un diagnóstico por la razón que sea? ¡Ah, no! ¡Vosotres estáis diciendo que sois autistas porque queréis casito, paguitas y toda la parafernalia! Porque no os olvidéis: ser discapacitades es un chollo, según les policías.
Lo que este tipo de gente no entiende es que no tienen derecho a exigirnos pruebas de que somos autistas. Porque no hace falta ser genies para saber que el 99,99% de estas personas no tienen una formación relacionada con la salud mental, y por lo tanto, cualquier documento médico les puede parecer muy complicado de entender, o simplemente, falso. Y de nuevo, si no existen documentos, por la razón que sea, tampoco tenemos que entrar en profundidad por qué sabemos que somos autistas.
Porque estes policías disparan primero y luego preguntan.
No vale la pena intentar razonar con elles, porque a la mínima nos van a invalidar. ¿Que tenemos trabajo? ¿Pareja? ¿Amigues? Pues ya está, somos autistas de chichinabo, que tenemos que tener alguna razón para ir por ahí diciendo que lo somos.
Y de nuevo, no podrían estar más equivocades.
¿Cuántas veces hemos dicho que somos autistas y nos han mirado con caras de disgusto? ¿O nos han dicho el típico “Pues tú no pareces autista”? ¿O nos han tratado como si fuéramos Rain Man? Ser autista no es el chollo que estes capacitistas creen que es. Porque es lo que son: unes capacitistas de aúpa.
Hace tiempo expliqué por qué ser autista no es guay, y es algo que mantengo a día de hoy. No, la sociedad nos trata fatal por eso de que somos diferentes, y ya se sabe, la gente teme todo aquello que no entiende. Así normal que queramos buscar comunidad. Vivir sintiendo que eres une rarite y que nadie de tu alrededor te entiende es agotador. Y si encima tenemos a gente intentando juzgar qué es y qué no es autismo desde su limitadísimo conocimiento… Apaga y vámonos.
Como siempre digo: tienen derecho a cero explicaciones, y da igual cómo se pongan, mi expediente médico no va a cambiar solo porque elles no están de acuerdo. Ahí va a seguir diciendo que soy autista. Mi cerebro tampoco va a cambiar. Yo nací autista y me voy a morir autista. Al igual que todes nosotres.
Así que nada… Si eres une de les policías del autismo y este texto te ha molestado, te voy a dejar un regalito.
Ojalá poder ponerme este Bob Esponja en una camiseta, pero la imagen es de baja calidad… ¿Pero a vosotres? Pues que os jodan un ratito.